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Cómo gestionar eficazmente el presupuesto de construcción

El presupuesto de construcción es uno de los aspectos más importantes de un proyecto de obra, ya que determina el coste total y el beneficio esperado. Sin embargo, elaborar y gestionar un presupuesto de construcción no es una tarea sencilla, ya que implica muchos factores y variables que pueden cambiar a lo largo del proceso.

En este artículo, te explicaremos cómo hacer y calcular un presupuesto de construcción de forma eficaz, siguiendo algunos consejos y buenas prácticas que te ayudarán a optimizar los recursos y evitar sorpresas desagradables.

¿Qué es un presupuesto de construcción?

Un presupuesto de construcción es una estimación del coste total de la construcción, en la que se desglosan los costes parciales o partidas de cada una de las tareas, materiales y recursos necesarios para llevar a cabo el proyecto.

El presupuesto de construcción sirve para:

  • Planificar y controlar los gastos del proyecto.
  • Evaluar la viabilidad económica y financiera del proyecto.
  • Comparar diferentes alternativas y opciones de diseño y ejecución.
  • Negociar con los proveedores, subcontratistas y clientes.
  • Cumplir con las normativas y requisitos legales.

¿Cómo hacer un presupuesto de construcción?

Para hacer un presupuesto de construcción, se deben seguir los siguientes pasos:

  1. Obtener las cotizaciones de precio: Si eres un contratista que prepara un presupuesto de construcción para un cliente, debes solicitar cotizaciones de precio a los subcontratistas y proveedores que intervendrán en el proyecto, para poder proporcionar estimaciones de costes precisas. También puedes consultar bases de datos o programas informáticos que te faciliten precios de referencia.
  2. Crear una lista de tareas detallada: Debes dividir el proyecto en todas las tareas que necesites realizar, desde la preparación del terreno hasta la entrega final. Cada tarea debe tener una descripción clara, una unidad de medida, una cantidad y un precio unitario.
  3. Calcular los gastos directos e indirectos: Los gastos directos son aquellos que se pueden atribuir directamente al proyecto, como los materiales, la mano de obra, el transporte o el alquiler de maquinaria. Los gastos indirectos son aquellos que no se pueden asignar directamente al proyecto, pero que son necesarios para su realización, como los gastos administrativos, los impuestos, los seguros o las contingencias.
  4. Sumar los costes parciales: Una vez que tengas todos los costes parciales o partidas, debes sumarlos para obtener el coste total del proyecto. También puedes aplicar un porcentaje de beneficio sobre el coste total para obtener el precio final que cobrarás al cliente.
  5. Presentar el presupuesto al cliente: El último paso es presentar el presupuesto al cliente, acompañado de un documento que explique el alcance del proyecto, las condiciones de pago, las garantías y las posibles modificaciones o variaciones que puedan surgir durante la ejecución.

¿Cómo gestionar un presupuesto de construcción?

Una vez que tengas el presupuesto de construcción aprobado por el cliente, debes gestionarlo adecuadamente durante la ejecución del proyecto, para asegurarte de que se cumple con lo establecido y se evitan desviaciones o sobrecostes.

Para gestionar un presupuesto de construcción, se deben seguir los siguientes consejos:

  • Utiliza un software o una herramienta digital que te permita realizar un seguimiento del trabajo, de los miembros del equipo y de los entregables en un solo lugar.
  • Actualiza el presupuesto periódicamente con los datos reales del avance del proyecto, comparando los costes previstos con los reales y detectando posibles desviaciones o anomalías.
  • Comunica de forma clara y transparente con los proveedores, subcontratistas y clientes, informando de los cambios o incidencias que puedan afectar al presupuesto y negociando las soluciones más adecuadas.
  • Controla la calidad de los materiales y de la ejecución, realizando ensayos y pruebas que garanticen el cumplimiento de las especificaciones técnicas y normativas.
  • Evalúa el resultado final del proyecto, analizando el grado de satisfacción del cliente, el margen de beneficio obtenido y las lecciones aprendidas para futuros proyectos.

Como ves, gestionar un presupuesto de construcción es un proceso que requiere mucha planificación, organización y comunicación. Sin embargo, si sigues estos pasos y consejos, podrás optimizar los recursos y obtener los mejores resultados para tu proyecto.

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